PRUEBA ORAL // 1 pasito + cerca

La prueba oral. Por dónde empezar.

Bueno, como pone en las bases consiste en una presentación de 3 min en inglés y después una entrevista personal. La prueba oral es fundamental. Es la más importante de todas, creo yo, porque aquí deciden si tienes lo que hace falta para ser un exchange student. Ya no cuentan solo tus notas: valoran tus habilidades sociales, tu capacidad de interaccionar con extraños, cómo eres de fuerte emocionalmente, de qué manera reaccionarías ante determinadas situaciones...

La presentación yo recomiendo hacerla sobre un tema que domines y con el que te sientas cómod@, ya que así si te quedas en blanco siempre puedes improvisar algo. Además luego te hacen preguntas sobre tu exposición. Yo lo hice sobre libros. Hablé de mis favoritos, de cómo me identifico con ciertos personajes y por qué, qué me gusta encontrar en un libro y por qué escribo. La verdad es que me preparé la presentación muchísimo. La reescribí varias veces, la corregí, me la aprendí, la ensayé... No me puedo creer que algunos bk2 ni se la supieran bien. Vamos, con lo nerviosa que estaba yo si no me la hubiera aprendido a la perfección me habría dado algo.

Me entrevistaron dos hombres, uno bastante más mayor que el otro. A mí me habían asignado el turno de 16.00 a 17.00, así que a las 16.00 ya estaba yo delante del ordenador con skype puesto esperando la llamada.

Me llamaron a las 17.15. Estuve ahí esperando todo ese rato primero bastante tranquila, y luego cada vez más nerviosa. Me puse música súper alta y empecé a dar vueltas por mi habitación, cantando, recitando mi presentación y mirando la pantalla del ordenador todo a la vez. Al final mi madre me dijo que la bajara porque molestaba a los vecinos. Cuando me llamaron no me lo creía, porque ya pensaba que se habían olvidado de mí. Les cogí y me preguntaron en inglés de que iba a hacer la presentación, yo se lo dije y ya empecé.

Mientras la hacía los entrevistadores me cortaron diciendo que no me oían bien y que fuera a por cascos con micrófono. Esto fue horrible. Perdí el hilo, tuve que buscar por la casa unos cascos y por suerte encontré unos de mi hermano. Los conecté y tuve que retomar la presentación por donde la había dejado. Menos mal que la tenía muy asimilada, porque así no tuve casi problemas en seguir.

Después me preguntaron en inglés algunas preguntas sobre mi presentación. También me preguntaron si escribía, si había ganado concursos y cosas así, y yo les conté un poco. Después ya pasamos al español.

Un dato curioso es que para EEUU sin contar con los de Galicia había 210 plazas. A la prueba oral pasamos 630, es decir, que había tres personas por beca. Uno cumplía su sueño y otros dos se quedaban fuera. Yo pensé mucho sobre esto cuando me enteré. Por un lado pensaba que si de 8000 yo había conseguido hacerme un hueco entre los 630 preseleccionados, ¿por qué no lo iba a lograr ahora, que las posibilidades eran mucho mayores? Pero por otro… Dios, tenía que demostrar ser más abierta de mente, madura, capacitada para irme un año al extranjero o lo que fuera que tuvieran en cuenta que otras 2 personas que si habían llegado hasta el mismo punto que yo probablemente no serían muy distintas a mí.

Había pensado mucho en qué decir para convencer a los entrevistadores de que realmente era a mí a la que tenían que coger, y mostrarles tanto de mi como me fuera posible en un cuarto de hora. Pero una vez que empezó la entrevista en español me olvidé de todo lo ensayado y simplemente la cosa empezó a fluir. Poco a poco empecé a soltarme y a estar menos tensa, y hasta hice a los entrevistadores reír (aunque seguramente se rieran para reducir la tensión y no porque yo fuera graciosa, pero bueno).

Las preguntas se volvían más comprometidas conforme avanzaba la entrevista. Lo que empezaron siendo comentarios curiosos acerca de mi colegio (¿Vas a un colegio solo de chicas?, ¿Podrías ir a un colegio mixto?), pasó a ser un interés por mi familia (¿Cómo te enteraste de la beca?, ¿Cómo están llevando todo tus padres?, ¿Cómo es tu relación con tu hermano?, ¿Tienes mascotas?). Y después se empezó a complicar. ¿Cómo te describirían tus amigas?, empezaron. Hice una descripción breve de mi (odio describirme porque nunca estoy segura de qué decir). Pero lo que vino después fue peor. ¿Qué responderíais vosotros si os preguntaran qué cosas malas dirían vuestr@s amig@s de vosotros sin quedar fatal? Creo que esta es la única pregunta de todas en la que me corté. Todas las demás me salieron naturales, pero esa tuve que pensármela. Si no dices alguna cosa pensarán que te crees perfecto, pero tampoco puedes decir nada excesivamente malo. Improvisé algo y hasta les hice reír con mi respuesta. También me preguntaron como reaccionaría si me tocara de familia una pareja de homosexuales. Mi respuesta debió de gustarles mucho, porque sonrieron y asintieron. A otros bk2 a los que les preguntaron esta pregunta les costó responder, pero la verdad es que a mi me salió natural. Les dije la verdad: que consideraba que lo más importante era que fueran buenas personas y me trataran bien, y lo demás es secundario.

Después ya vinieron cosas como por qué consideraba que yo debía ganar la beca, si lo sabían mis compañeras de clase y qué opinaban, si sería capaz de adaptarme a cualquier clima (aquí metieron el típico chiste del tiempo en Zaragoza, que es bastante extremo, y yo les respondí algo del cierzo y nos volvimos a reír). La verdad es que me preguntaron muchas más cosas, pero ahora no caigo. Si sería capaz de pasar un año alejada de mi familia y cosas así. En esos momentos estaba tan metida en la entrevista que ahora lo veo todo borroso, como si hubiera sido un sueño.

Nos despedimos a los 13 mins y yo me quedé con una extraña sensación en el pecho, entre alivio porque sentía que no me había ido mal y a la vez nervios por conocer el resultado (que salía 2 semanas después o algo así). Mi madre había estado escuchando por detrás de la puerta todo el rato y entró en mi cuarto con lágrimas en los ojos y diciendo “¡Mi niña!”, “¡Qué orgullosa estoy de ti!” y las típicas cosas de madre.

Y una vez más, a esperar. Juro que si esta beca no me ha enseñado especialmente a tener paciencia y esperar, no me ha enseñado a nada.

Mención especial a Teresa Campo, que estaba muy afectada por no haber aparecido en entradas anteriores. Ella me dio mucho apoyo y me llamó justo después de la entrevista para conocer los detalles como la buena amiga que es <3. Además, es mi representante y se puso en contacto con Amancio para que me colara en el programa.

También agradecer a Gon, Irene y Pauli, que también llamaron (tuve que repetir la misma historia 4 veces seguidas más la vez que se lo conté a mi padre más la vez que se lo conté al resto del mundo, pero no me importó). Qué gustazo teneros.

Eso es todo (por ahora).

PD: me doy cuenta de que voy con bastante atraso (todo esto pasó hace casi 2 meses) pero es que no he tenido tiempo :/

stayyy tuned c: