"¿Que te vas?" // LISTA DE SELECCIONADOS


Parece que fue ayer cuando anunciaron la lista de becados. La colgaron a las 13.00. Yo al principio no estaba tan nerviosa, pero conforme giraban las manecillas del reloj podía sentir el nudo en mi estómago crecer poco a poco. Yo me había concienciado de que no iba a salir para que así si no me daban la beca no me quedara tan chafada. Pero por primera vez realmente me planteé, ¿y si no me la dieran?
Pero, ¿y si me la dieran? ¿Y si realmente yo fuera uno de los elegidos? ¿Podía eso ser posible?
En biología, la clase que tenía a las 13.00, me sentía apunto de explotar. Mi profesora no me quería dejar mirarlo hasta que sonara el timbre porque estábamos haciendo un experimento. Por otro lado, yo tampoco lo quería mirar en el colegio porque no me apetecía estar rodeada de todo el curso en el caso de que no saliera. Pero cuando finalmente sonó el timbre todo el mundo me arrastró a clase y me dijo que lo mirara en el móvil, estaban literalmente unas 40 personas a mi alrededor y yo ya sentía que no podía respirar entre los nervios y que me rodeara tanta gente. Tuve que apartarme un poco y decirles que ellas se quedaran en un rincón de la clase y yo en el contrario mientras se cargaba la página de la FAO. Por un lado quería intimidad, porque si no me la daban me iba a sentir un poco ridícula. Pero la curiosidad pudo más.

Abrí la lista de seleccionados entre suspiros, deseando con todo mi corazón encontrar mi nombre en ella. Todas me miraron expectantes. No pude evitarlo y solté una especie de grito ahogado antes de llegar a la T, simplemente por los nervios. Todas pensaron que se debía a que ya había visto el resultado, así que negué rápidamente con la cabeza. Seguí bajando y de un segundo al otro el sueño se había cumplido.

Tobías de Gregorio, Elvira. Ahí estaba yo.

-Sí -, dije bajito. Levanté la vista hacia mis compañeras sin verlas a ellas realmente, sino más bien una masa de colores rojo y verde que se movía hacia mi. Y después todo el mundo empezó a gritar.

Primero me abrazó la Forcena. Segundos después llegó Irene, y después unas 20 personas más, y todas gritaban mi nombre, y yo apenas podía respirar pero no importaba. Cuando levanté la cabeza vi a Cati subida a una mesa, diciendo que como no había suficiente espacio a mi alrededor me abrazaría desde arriba, y después vi a la Campo escalando por los pupitres tratando de llegar hasta mí, y ahí fue cuando me emocioné.
A pesar de que en ese momento no acababa de asimilar lo que estaba pasando, (y no creo que a día de hoy, dos meses después, lo haya terminado de hacer), el verme rodeada de todas mis compañeras y sentirme tan querida y apoyada me pudo.

Es sin duda uno de los recuerdos del colegio más bonitos que tengo.

Después empezaron a entrar las profesoras a darme la enhorabuena. Algunas estaban muy emocionadas, lo que hizo que yo me emocionara más. Después llamé a mis padres desde el pasillo del colegio. Mi madre estaba que no se lo creía. “¿Qué te vas? ¿Te vas de verdad? ¿Te la han dado?” Mi padre, sin embargo, dijo que lo sabía, que desde el principio sabía que me la darían, que era la mejor. Ambos empezaron a llorar y repitieron muchas veces lo orgullosos que estaban de mi. Mi madre incluso se empezó a agobiar porque ya quería empezar a preparar todo.

Creo que pocas cosas más emocionantes me han pasado en la vida que ganar esta beca. La aventura empezó desde el instante en que vi mi nombre en esa lista, y desde entonces no ha hecho más que mejorar.

Ese mismo día mi padre me dijo que también se la habían dado a otra chica de Zaragoza que casualmente era vecina de mi tía. La chica en cuestión, que se llama Pilar, le pidió a mi tía mi número. A partir de ahí empezamos a hablar. Me dijo que había un grupo de WhatsApp de becados y que lo había encontrado por Twitter. Con el hastag #becasamancioortega encontré a la chica que lo había creado y me metieron. Cuando entré éramos 60. A día de hoy estamos 180 amanciers. Y poco a poco hablando con ellos me di cuenta de que esto era real.

Después todo fue papeleo que había que mandar a Madrid, esperar, la llegada de la información de las primeras familias asignadas y esperar más. Pero ya explicaré eso más adelante.

Bueno, al fin he escrito esta entrada. Ahora empezaré a escribir las del NB (los que sepáis un poco sobre la beca sabréis a qué me refiero. Sino, en breves lo veréis). Lo bueno ha empezado, y yo me sigo sintiendo en una nube.


Estad atentos, que dentro de poco volveréis a tener noticias de mí.




Comentarios

Entradas populares de este blog

COMIENZA LA AVENTURA